Tras el brote de incendios en la provincia argentina de Chubut el pasado martes, el presidente Alberto Fernández visitó este sábado la región para constatar los daños causados y anunciar un paquete de ayudas económicas para los afectados. Con insultos y pedradas, un grupo de manifestantes en contra de la minería atacó la camioneta en la que Fernández y su comitiva abandonaban la localidad de Lago Puelo. Nadie resultó herido, pero el suceso obligó al mandatario a cancelar su visita al resto de localidades de la zona.

Decenas de personas atacaron a pedradas y se abalanzaron sobre la camioneta del presidente Alberto Fernández este sábado en Lago Puelo, localidad de la provincia de Chubut, Argentina. El mandatario se desplazó hasta la provincia del sur del país para constatar los daños provocados por los incendios que asolan la región desde el martes y para anunciar un paquete de ayudas económicas a los afectados. Pero su visita no terminó bien.

Un grupo de manifestantes contra la minería esperaba a Fernández y a su gabinete a la salida del Centro Cultural de Lago Puelo, a donde el dirigente había asistido. Mientras los ciudadanos gritaban consignas en contra de la explotación minera y del gobernador de la provincia de Chubut, Mariano Arcioni, Fernández logró llegar a su camioneta con dificultades. Ante la situación, el gabinete de Presidencia decidió cambiar su ruta y acercase al helipuerto más cercano para abandonar la zona por aire.

La propuesta de un proyecto minero a gran escala en Chubut ha generado el rechazo de gran parte de la sociedad civil. Por esta razón, los manifestantes se reunieron para protestar en contra de su aprobación y para pedir a la Administración de Fernández que la bloqueara. No obstante, el presidente argentino remarcó que esa decisión estaba fuera de su alcance.

«Es un tema de la provincia que tienen que resolver los chubutenses. Conozco muy bien las dos miradas que hay, pero no es un tema mío», dijo Fernández al respecto. También defendió al pueblo chubutense y dijo que la violencia mostrada era obra de algunos “pocos”.

«Vine a escuchar a la gente, a ponerme a disposición y a trabajar con todos para que esto se resuelva rápidamente», afirmó el kirchnerista sobre los incendios en la provincia. Con ese fin, explicó que desde el el gobierno nacional se está colaborando con las autoridades provinciales para ayudar a los argentinos golpeados por la catástrofe en la región andina.

Por su parte, el gobernador de Chubut, Mariano Arcioni, condenó los hechos violentos y agradeció al presidente su visita y siempre «ocuparse de los chubutenses».