Un panorama crítico, así enfrenta Santa Cruz otro año de incendios forestales. Los bomberos aseguran que necesitan que sus equipos sean renovados y la Gobernación cruceña alerta que este año será uno de los más secos de las últimas dos décadas, por lo que el riesgo de que los incendios se propaguen es mucho mayor.

A diferencia de otros años, esta vez la temporada de incendios se adelantó y hasta la fecha ya han atendido emergencias de magnitud, especialmente en el Pantanal boliviano y en la Chiquitania, afectando a 147.254 hectáreas en lo que va de este año en todo el departamento cruceño.

Precisamente por eso, la Gobernación alista la declaratoria de emergencia departamental por incendios forestales, ya que los municipios de Roboré y San Matías, que son los más afectados y fuego no da tregua, están a punto de completar los procedimientos para declarar desastre por incendios, debido a que han agotado sus recursos y necesitan apoyo económico de la instancia departamental para seguir combatiendo el fuego.

Fuente: eldeber.com.bo