En las últimas semanas, el NFPA Journal en Español e innumerables otros medios de comunicación volvieron a examinar los catastróficos resultados del 11 de septiembre de 2001. Al igual que muchos, sentí la gravitación hacia esos reportajes con la esperanza de que de algún modo, aunque pequeño, por lo menos sanaran viejas heridas o hagan que el ataque al país se sintiera menos personal, menos desgarrador. Esa esperanza no se materializó este año. Y dudo que jamás lo haga. De hecho, quizás eso sea algo bueno.
El 11/9 no es simplemente una fecha en el calendario o una referencia a la historia estadounidense. Para muchos de nosotros, es más profundo y debería serlo. Pero, a medida que lidero una organización de seguridad hacia sus próximos 125 años de reducir pérdidas en nuestro mundo, tengo que hacer una pregunta oportuna: ¿Alguna vez has considerado las maneras en las que el 9/11—a pesar de lo desgarrador—nos fortaleció?
Nuestra determinación colectiva luego del 11/9 fue Nunca Olvidaremos. Aunque es un impacto menos conocido del 11/9, esa misma solidaridad impulsó a individuos y organizaciones dentro del sector de la protección contra incendios y seguridad humana para tomar lecciones de las operaciones y resultados del 11 de septiembre y efectuar cambios en gestión de emergencias, seguridad humana y de edificaciones, protección contra incendios, egreso, sistemas de notificación y respuesta a emergencias. Y aunque estas noticias pueden no proveer consuelo a los que perdieron seres queridos el 11/9, los ciudadanos en Estados Unidos deberían reconfortarse con el hecho de que estamos más seguros hoy, de muchas maneras, debido a los inolvidables actos terroristas ocurridos hace 20 años.
Los modernos edificios de gran altura tienen mejores sistemas de notificación masiva para que cuando ocurra un incendio u otro desastre devastador, los ocupantes escuchen las guías de seguridad en vez de las señales de alarmas de incendio. Esto es un beneficio tanto para los ocupantes como para los socorristas.
En la actualidad, cuando ocurre un evento adverso, trabajadores, residentes y los bomberos a cargo de evacuarlos tienen todos más espacio para navegar hacia un lugar seguro debido a que ambos el NFPA 101®, Código de Seguridad Humana, y el NFPA 5000®, Código de Seguridad y Construcción de Edificios, aumentaron los requisitos del ancho mínimo de las escaleras de salida luego del 11/9 para aliviar los embotellamientos que se vieron en las Torres Gemelas.
Adicionalmente, se hicieron cambios en NFPA 1981, Norma sobre Aparatos Respiratorios Auto-Contenidos (SBCA) de Circuito Abierto, para asegurar que el equipo SCBA que usan los bomberos protejan efectivamente contra ataques químicos, biológicos, radiológicos y nucleares.
Lecciones aprendidas ese día en Manhattan también demostraron que el liderazgo situacional es primordial cuando se produce una catástrofe y resultó en cambios a NFPA 472, Competencias para Socorristas de Incidentes de Materiales Peligrosos/Armas de Destrucción Masiva.
Uno de los desafíos más notables durante los esfuerzos de respuesta y rescate en el World Trade Center fue las comunicaciones. Fallas tecnológicas dificultaron los esfuerzos de intervención de emergencia en ambas torres y activaron señales de alarma sobre ineficiencias del comando de incidentes. Como resultado, se agregaron requisitos en NFPA 1, Código de Incendios para la evaluación por parte del departamento de bomberos de capacidad de radio dentro de edificios en el 2009 y ha evolucionado desde entonces. Estas fallas también resultaron en un nuevo centro de operaciones de US$17 millones para el Departamento de Bomberos de Nueva York el cual habilitó la comunicación entre el Departamento de Bomberos de Nueva York y otros departamentos municipales e incorporó tecnologías de vanguardia, tales como la capacidad de los vehículos de emergencia de transmitir imágenes de la escena de un incidente al personal del centro de operaciones. A escala nacional, una de las últimas mejoras a las comunicaciones de emergencias impulsadas por el 11/9 en efectuarse fue FirstNet. La red de banda ancha nacional, la cual está disponible exclusivamente para socorristas, establecida en el 2012 y le da a los socorristas en áreas donde ocurren incidentes de gran escala, desde derrumbes de edificios a incendios forestales, prioridad a la red.
Fallecieron 412 trabajadores de emergencias ese día en Manhattan, 343 de los cuales eran bomberos del Departamento de Bomberos de Nueva York. Estuvieron presentes decenas de miles más que trabajaron en la Zona Cero en los meses que le siguieron—varios cientos sucumbieron a enfermedades contraídas del evento, mientras que otros siguen sufriendo con serias condiciones de salud. Dado el alto perfil y llamada emocional del 11/9, los legisladores han sido mucho más receptivos a escuchar a las autoridades bomberiles cuando hablan sobre el hecho de que los bomberos tienen mayor susceptibilidad a enfermedades ocupacionales y la necesidad de beneficios para sobrevivientes del 11/9.
Finalmente, aunque no es del todo el nivel de preparación y colaboración que abogamos con el Ecosistema de Protección contra Incendios y Seguridad Humana de la NFPA, a lo largo de los últimos 20 años, hemos visto mayor énfasis en gestión de emergencias holístico. De hecho, NFPA 1600®, Norma sobre Manejo de la Continuidad, de Emergencias y Crisis, fue reconocida por la Comisión Nacional sobre Ataques Terroristas Sobre los Estados Unidos (la Comisión 11/9) como la Norma Nacional de Preparación de Estados Unidos. Ampliamente utilizada por el público y entidades sin fines de lucro, no gubernamentales y privadas a nivel local, regional, nacional y global, NFPA 1600 ha sido adoptada por el Departamento de Seguridad Nacional de los EE. UU. como norma de consenso voluntarios para preparación para emergencias.
Todos estos cambios—y muchos otros—que resultaron a raíz del 11/9 son señales de progreso en la comunidad de protección contra incendios y seguridad humana. Estas mejoras pueden palidecer en comparación a la tremenda pérdida que experimentamos hace dos décadas, pero demuestran que los profesionales enfocados en la seguridad han cumplido con sus promesas de Nunca Olvidar. Seguiremos con nuestro compromiso de fomentar la seguridad a medida que avanzamos.
Source: https://www.nfpajla.org/news/categorias/1959-cumpliendo-las-promesas-de-nunca-olvidar