Tanto las plantas de cannabis como la propia industria han crecido mucho a lo largo de la última década. En 2012, Colorado y Washington se convirtieron en los dos primeros estados en legalizar el uso recreativo del cannabis. Más tarde, muchos otros estados hicieron lo mismo. Hasta noviembre de 2022, un total de 21 estados y el Distrito de Columbia habían aprobado el uso de cannabis con fines recreativos.

La legalización les dio a muchas personas la oportunidad de usar cannabis para tratar afecciones como el dolor, las migrañas, la depresión y la ansiedad, entre otras, sin dejar de cumplir la ley. Con el aumento de la demanda surgió la necesidad de aumentar la oferta.

Comenzaron a surgir instalaciones de todas formas y tamaños en los estados donde se legalizó la producción de cannabis. Si bien lo más común es usar el cannabis para fumar, existen otras formas de productos hechos a base de cannabis, como golosinas, aceites, suplementos y extractos. Todos estos productos se fabrican a través de la extracción de cannabidiol (CBD) y tetrahidrocannabinol (THC) de la planta.

¿Cuáles son las preocupaciones de seguridad?

La extracción del aceite de cannabis puede plantear muchos problemas de seguridad, incluido el riesgo de incendio y explosión. En muchos casos el proceso de extracción en sí, hace que el lugar sea peligroso debido al uso de solventes inflamables como butano, pentano, hexano, propano y etanol, que pueden liberarse durante el procesamiento y la extracción de aceites vegetales. La instalación, el mantenimiento y el uso adecuados del equipo de extracción utilizado durante el procesamiento de aceites de cannabis contribuirán en gran medida a mantener la seguridad general dentro de este tipo de instalaciones.

RelacionadoLee, “La Nueva Cara de la Marihuana” publicada en el 2018 en el NFPA Journal en Español.

¿Qué dice el NEC?

La edición de 2023 del NFPA 70®, Código Eléctrico Nacional (NEC) logró avances significativos para ayudar a lograr la seguridad eléctrica en las instalaciones que realizan la extracción de aceite de cannabis con la adición del artículo 512: Equipos y sistemas para aceite de cannabis que utilizan materiales inflamables.

En este nuevo artículo, se establecen requisitos eléctricos para equipos de preparación de aceite de cannabis, equipos de extracción, cabinas, equipos de posprocesamiento y sistemas que utilizan materiales inflamables (gas inflamable, vapor inflamable producido por líquido, vapor combustible producido por líquido) en instalaciones comerciales e industriales. Un aporte del público que se presentó para el NEC de 2023 como parte del proceso de desarrollo de normas de la NFPA, PI-2285, apoyó la creación de un nuevo artículo que “mejore el nivel de seguridad” dentro de la industria del cannabis. En la justificación de PI-2285, se brindaron ejemplos de incidentes de explosiones en la vida real dentro de las instalaciones de producción de cannabis, algunos de los cuales requirieron más de 200 bomberos para combatir el incendio y dejaron a un gran número de bomberos heridos. En una industria que tiene procesos y procedimientos desconocidos para muchas autoridades competentes (AC) y que continúa experimentando un enorme crecimiento, es fundamental proporcionar requisitos de seguridad en torno a las instalaciones que puedan verificarse en el momento de la inspección.

Si bien es probable que el nuevo artículo 512 se extienda en ciclos futuros del NEC para ofrecer más orientación, el contenido inicial incluido en el NEC de 2023 ya establece algunos de los requisitos necesarios para que los diseñadores, los instaladores y las AC logren la seguridad eléctrica de los equipos y sistemas para cannabis.

El artículo 512 está compuesto por tres partes: Parte I: General; Parte II: Cableado; y Parte III: Equipo. La sección 512.3 es un componente clave para las instalaciones, ya que establece los requisitos para la clasificación de los equipos y sistemas de aceite de cannabis que pueden liberar materiales inflamables durante la operación. La sección se divide en la parte A, que aborda las instalaciones fuera de las cabinas, y la parte B, que aborda las instalaciones dentro de ellas. Luego, cada una de estas áreas se divide en instalaciones donde se liberan gases y vapores inflamables e instalaciones donde no se liberan gases y vapores.

Clasificar el área de manera correcta es un paso inicial importante a medida que avanzamos hacia las partes II y III del artículo 512 para determinar cómo se debe realizar el cableado y las instalaciones de equipos en lugares peligrosos y alrededores. La parte III en particular incluye los requisitos para que el equipo y los sistemas estén listados y marcados. Además, brinda orientación sobre cuándo es necesario realizar la detección de gas.

El nuevo artículo 512 del NEC de 2023 es un excelente punto de partida para comenzar a establecer requisitos de seguridad eléctrica en las instalaciones de cannabis, pero, como es de esperar, las necesidades de seguridad no terminan ahí.

Una nueva y exclusiva norma sobre cannabis

Actualmente, la NFPA se encuentra en etapa de desarrollo de la NFPA 420, Norma sobre la Protección contra Incendios en Instalaciones de Cultivo y Procesamiento de Cannabis. El objetivo general de la NFPA 420 es abordar la protección de las instalaciones donde se cultiva o procesa cannabis contra incendios y peligros relacionados. Las actas de reuniones iniciales de la página de información del documento NFPA 420 reflejan los grupos de trabajo del comité que trabajan para desarrollar capítulos preliminares que brinden información relacionada con los fundamentos, el cultivo en interiores, el secado/procesamiento y la extracción. Siempre y cuando el desarrollo del borrador progrese dentro del comité técnico y el Consejo de Normas de la NFPA lo apruebe, el objetivo es tener un documento de la NFPA 420 inicial disponible para recopilar aportes del público en algún momento de 2024.

La velocidad de crecimiento de la industria del cannabis no parece disminuir. Según un artículo reciente de Forbes (en inglés), la firma de investigación de mercado BDSA pronostica que las ventas de cannabis en los Estados Unidos crecerán de 25.000 millones de dólares en 2021 a 40.000 millones en 2026. El hecho de que haya más instalaciones, más procesamientos y más trabajadores hace crecer la necesidad de seguridad en la industria del cannabis. El desarrollo continuo de códigos y normas que aporten conocimientos a quienes diseñan, trabajan e inspeccionan estas instalaciones es fundamental para lograr un alto nivel de seguridad dentro de las plantas de cultivo y procesamiento de cannabis.

Consideración importante: Cualquier opinión expresada en esta columna (blog, artículo) es la opinión del autor y no representa necesariamente la posición oficial de la NFPA o sus Comités Técnicos. Además, este contenido no está diseñado ni se debería usar para proporcionar consultas o servicios profesionales.

COREY HANNAHS, Especialista sénior en contenido eléctrico